Es la segunda carrera que corro en esta temporada después de la de Noia este verano.
Me gusta ir con tiempo para vivir el ambientillo, calentar, estirar y sobre todo no ir con nervios porque pienso que voy a llegar tarde, pero como siempre no lo logro. A las 18:27 estaba poniendo el pie en el anden de metro de Medez Alvaro, el calentamiento lo hice por los pasillos del metro y de la estación sur, y el estiramiento, justo en el momento del disparo saltando las vallas para ponerme por la mitad.
Empiezas a correr y la alegría te recorre todo el cuerpo, parones, esquivas a la gente y ves el kilómetro 1, miras el reloj y compruebas que a pesar de todo lo has corrido en 4:09; te ilusionas pero al rato empiezas ha pensar yo no corro tan rapido, debe estar mal medido o yo he recortado mucho por las aceras... Uno es de naturaleza pesimista, como se puede ver.
Mi objetivo no era corre fuerte, pues ese fin de semana no hemos llevado un sustillo con P, y la mente y el corazón estaban en otras cosas, pero viendo lo visto decides ir más fuerte de lo que tenías previsto (4:30 min/km).
Y corriendo, corriendo, llegamos al km 5 con las primeras cuestas, decido regular un poco hasta el kilómetro 8 y a partir del 9 a muerte.
Desde el Km 6 nos juntamos un grupo de tres, uno de ellos de vez en cuando nos adelanta, pero se le ve un poco forzado, le alcanzamos varias veces y es a partir del 9 cuando decido tirar y los dejo atrás.
Es una constante en mis carreras: los 5 primeros kilómetros a mi ritmo, luego te empiezas a encontrar un poco fatigado y te adelantan, le observas y si ves que es de tu nivel, le sigues; y el ultimo kilometro, a muerte.
Al final muy contento, he disfrutado mucho y no he estado agotado.
Tiempo mio: 43:39
No hay comentarios:
Publicar un comentario