miércoles, 6 de marzo de 2013

Logistica del Maratón


Me inscribí a la carrera a mediados de enero, el paso siguiente era buscar medio de locomoción y alojamiento. El avión tenía precios prohibitivos y el Ave si no eras cuatro para ocupar una mesa tampoco rentaba, con lo que la opción era el coche y gracias que llevaba acompañante.
Una vez elegido como ir, no me importaba no estar alojado en Sevilla, sigue primando en este tiempo de crisis, un alojamiento barato y relativamente cercano. Este lo encontré en Bormujos, a 10 km de Sevilla, siendo una localidad tranquila, residencial y de un nivel económico bueno. Y lo mejor es que se trataba de un apartahotel. Nosotros elegimos la opción más barata, un estudio por 48 € las dos noches. El estudio contaba con una cocina completa con horno incluido, baño y sofácama que te lo dejan montado. Se trata de un bloque de apartamentos muy nuevos, limpios y con unas recepcionistas muy simpáticas.

Nosotros llegamos al estadio el sábado a las 14:00, aparcamos cerca de la puerta sur. El dorsal se recogió rápidamente y luego fuimos al extremo opuesto de la feria a por la bolsa del corredor. La feria no estaba mal, bastante stands y gente atendiéndolos amablemente. Rápidamente tuvimos que ir al Fuerte de la Cartuja para la comida de los hidratos de carbono, antes la pasta party. Al no conocer la zona tuvimos que rodear todo el recito de Isla Mágica, mucha gente perdida buscando la entrada. La cola era grande llegamos a tardar hasta que nos despacharon los macarrones media hora. Nos tocó el pase a las tres y la ración fue escasa, aunque en bebida (refrescos y cerveza) no había restricciones.

El día de la prueba quería presentarme en el estadio sobre las 7:30 pero al final se nos dieron casi las 8:00. Cuando cruzamos el puente hacia la av. de Carlos III ya se veía coches con gente disfrazada de correr. Nos confiamos y empezamos a seguirles hasta que se metieron en un descampado que está todo lo largo del río a la izquierda y es donde montan un mercadillo pero fue entrar y darnos una impresión tan mala que salimos mas deprisa que nada. Al final aparcamos cerca del estadio, en la puerta de la Escuela Superior de Ingenieros, sin problema.

Nos dirigimos al estadio para entregar en el guardaropa lo que nos sobraba pero los 4ºC no ayudaban a desprenderse de muchas prendas. Me quedo con el cortavientos que en el momento de empezar se lo daría a M.... Nos dirigimos a la salida, situada a 800 m del estadio y calentamos aunque no hay mucha zona para ello, hacemos dos pises del miedo y me meto en el cajón.

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