martes, 24 de junio de 2008

La vuelta a la nueva casa en bici


Después de trabajar y hacer el brindis por el Rey, me esperaba la piscina con otros dos kilómetros por hacer. Hoy subiendo y bajando las escaleras notaba que las piernas estaban cansadas, que notaban los 40 largos de ayer; y así fue como lo noté nada más introducirme en el agua. Pensé: "hoy no voy a hacer los dos kilómetros, me conformo con uno". Y nadando, nadando me fui encontrando mejor pero notaba los hombros un poco doloridos, con lo que no quería machacar demasiado y fue así como me chupe 24 largo. Para relajarte y recuperar un poco no hay nada mejor que tumbarte al sol para secarte, tanto que me eche la siesta del carnero.

Y como tenía mono de bici, me fui a la antigua casa a por ella y desde allí al centro buscando carril bici y por la Casa de Campo en 45 minutos me plante en el portal de casa, con una sensación buenísima aunque con un poco de dolor en la rodilla izquierda. Es fantástico utilizar la bici para transladarte por ciudad, aprovechas el tiempo como cuando vas en metro leyendo, ves instantes de la vida, es como salir a la calle a pasear pero las sensaciones, los encuentros... todo se multiplica en la misma unidad de tiempo. ¿Qué sensación de libertad?, que se quite el coche, no sé si la moto también pues nunca he montado.

No hay comentarios:

indice