jueves, 23 de agosto de 2007

21 gramos



Excelente película, en la que se muestra al hombre como un ser multidisciplinar, un ser con muchas formas de ser; por lo que es muy difícil ser absolutamente bueno o malo.


Esto ultimo lo vemos en la sección de sucesos de los telediarios, aun después de haber matado a su pareja, los vecinos dicen no entenderlo porque es una bellísima persona y si preguntamos a su familia tendrá otro concepto de él y otro distinto, sus compañeros de trabajo. (solo es un ejemplo, yo estoy en contra de todo tipo de violencia).


¿Vamos representando un papel distinto dependiendo de quien tengamos delante? o ¿realmente somo así, y esa es nuestra válvula de escape para no volvernos locos con una personalidad rígida e inamovible?.


También el azar tiene mucho que decir, vivimos felices y cualquier suceso nos puede cambiar la vida. Para mi, una de las cosas que más miedo me da para que me pase, es que mate de forma accidental (atropello, accidente de trafico), porque se que mi conciencia no me dejaría vivir. Creo que no hace falta decirlo pero matar a alguien de forma consciente ni me lo planteo; ponía la idea de la muerte de forma accidental porque aparece el factor del azar.


Volviendo a la película, me gusto mucho la forma de narrar la historia, se suceden recortes de imágenes, lo mismo del pasado que del presente; hace que el espectador este mas activo y el director te trata como una persona adulta, no como a un niño que se lo tiene que dar mascadito.

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